Data Loading...
Revista Experimenta/Edición15/Mayo-2022
79 Downloads
9.66 MB
Twitter Facebook LinkedIn Copy link
RECOMMEND FLIP-BOOKS
C on sus 63.612 km 2 , Antioquia es el sexto departamento en extensión de Co- lombia y es por ello que la iniciativa de llevar la Universidad a las diferentes regiones, ha contribuido a darle presencia real al servicio de la educación pública en el departamento. Veinticinco años de historia cumplió el Pro- grama de Regionalización de la Universidad de Antioquia, programa que se constituye en uno de los principios rectores institucionales y que durante este tiempo ha ofrecido, por fuera de Medellín, las funciones básicas universitarias: inves- tigación, docencia y extensión. Es por ello que en la edición 15 de Experimenta invitamos a investigadores de las regiones para que nos cuenten de qué manera se involucran ellos y sus grupos de investigación en las realidades de los municipios antioqueños conocién- dolos, entendiendo sus problemáticas y brindando soluciones a las mismas a través del conocimiento, puesto que la lectura que la Universidad ha hecho de la realidad de los diversos sitios de la geografía del departamento a través de sus investigadores, es conoci- miento para compartir. Con base en su compromiso con las regiones del Departamento, en especial con la región de Urabá, en la sección ‘Vidas para el conocimiento’ encontraremos la historia de Juan Felipe Blanco Libreros, un investigador que ha dedicado su carrera investigativa al estudio de los manglares, “esas ‘selvas de mar’ que son un ecosistema costero vital para la sobrevivencia de múltiples especies”. En la sección ‘Trayectorias’ contactamos a un grupo de investigación cuyo laboratorio está en municipios y veredas, mucho más que en la ciudad de Medellín. Los profesores Omar Triana y Ana María Mejía del Grupo Biología y Control de Enfermedades Infecciosas , BCEI, nos cuentan la historia de búsqueda alrededor del fenómeno de la resistencia en la triada vector/patógeno/hospedero, origen del den- gue, la enfermedad de Chagas o la leishmaniasis. Investigadores de las sedes y seccionales de la Universidad nos comparten sus ex- periencias. Del Bajo Cauca, un proyecto sobre educación infantil de calidad y otro sobre el derecho a la educación de los niños hospitalizados; además nos describen la fusión de cul- turas que resulta de sus tradiciones alimentarias. De la seccional Oriente, investigadores acompañan a estudiantes de básica primaria en el aprendizaje de las ciencias naturales y se nos comparte un proyecto sobre identificación y aislamiento de hongos en relación con su capacidad para degradar colorantes. De una finca cafetera en Jardín investigado- res siguen los diminutos organismos detrás de una taza de café; y también del suroeste antioqueño, una investigación que busca comprender la salud ambiental de esta región. También compartimos en esta edición el trabajo de investigadores de varias disci- plinas quienes abordaron la detección de Covid en aguas residuales. Un artículo del Gru- po Infección y Cáncer en el que se expone la relación estrecha entre los estilos de vida y la posibilidad de desarrollar cáncer de mama. Investigadores del Instituto de Biología nos cuentan cómo se desarrolla el estudio de la biodiversidad a través de la taxonomía, el ofi- cio de nombrar las especies naturales. Y docentes del Instituto de Educación Física, se han hecho preguntas sobre la integración de tecnologías de la información y la comunicación como recursos didácticos y pedagógicos. Tenemos además la habitual invitación a leer un buen libro, en esta oportunidad “La invención de la naturaleza” de Andrea Wulf, un texto que ayuda a mejorar la com- prensión de la delicada e intrincada relación en que participamos todos los habitantes del planeta. Al final de la edición podremos disfrutar de una historia entretenida con el cuento “Cuestión de buenos negocios en la vida de Juan ”, un relato ligado a la conserva- ción del medio ambiente y también conoceremos los datos curiosos que nos comparte El Alkimista , los cuales nos aportan una óptica diferente e interesante sobre algunos de los artículos de esta edición.
Con ten do Edición
Edición 15
Revista Experimenta Publicación de la Vicerrectoría de Investigación de la Universidad de Antioquia ISSN 2357-3503 John Jairo Arboleda Céspedes Rector
Luz Fernanda Jiménez Segura Vicerrectora de Investigación Carmenza Uribe Bedoya Directora Sergio Andrés Urquijo Morales Lina Alexandra Gómez Henao Editores Comité editorial Carmenza Uribe Bedoya Bernardo Bustamante Cardona Luz Marina Restrepo Múnera Sara Cristina Vieira Agudelo Mario Víctor Vázquez Ceballos Gloria Valencia Bustamante Luz Adriana Ruiz Marín Producción y diseño Ángela González Restrepo Juliana Morales Urrego
Víctor M. Aristizábal Giraldo Dirección de Comunicaciones Universidad de Antioquia Corrección de texto John Sebastián Otálvaro Pérez Ilustraciones Carolina Gomes Fotografía Cortesía de los grupos de investigación y autores La Revista Experimenta es una publicación de la Uni- versidad de Antioquia que tiene como objetivo la di- vulgación de la actividad científica desarrollada en la Institución. Los artículos aquí publicados tienen fines educativos y divulgativos; por tanto, el contenido de esta publicación podrá ser utilizado únicamente con fines académicos y educativos, no comerciales, de acuerdo con la norma de propiedad intelectual.
Universidad de Antioquia Vicerrectoría de Investigación Recepción de correspondencia: Calle 70 No. 52 - 21 Teléfono (+574) 2195190
20
[email protected] www.udea.edu.co/experimenta
Apartado Aéreo 1226 Medellín, Colombia 2022
Enseñar hoy… ¿vocación o necesidad?
4
n- ni-
Edición 15
76 70 62 58 48 42 36 32 24 20 14 6
Detectar el covid-19 en aguas residuales ¿Un río camino a la UCI? Comprendiendo la salud ambiental del Suroeste antioqueño Enseñar hoy… ¿vocación o necesidad?
Hongos: más allá de lo visible Educación inicial de calidad
El privilegio de descubrir los anfibios en un país biodiverso Montaña, sabana y río. Consumos y tradiciones alimentarias en el municipio de Caucasia, Antioquia Juan Felipe Blanco Libreros. Un hombre de amores profundos Cuando algo en el circuito falla el bombillo no enciende y… ¿reímos o lloramos? ¿Cómo los parásitos y mosquitos se las ingenian para resistir al control? La aventura científica del Grupo BCEI Los diminutos organismos que le dan aroma y sabor al café Estilos de vida poco saludables: enemigos invisibles de los senos de las mujeres Pedagogía Hospitalaria: por el derecho a la educación en el Bajo Cauca La invención de la naturaleza. El nuevo mundo de Alexander von Humboldt Andrea Wulf Una cuestión de buenos negocios en la vida de Juan
94 90 86
48
86
Juan Felipe Blanco Libreros Un hombre de amores profundos
Pedagogía Hospitalaria: por el derecho a la educación en el Bajo Cauca
5
Detectar en aguas el covid-19 residuales Diana C. Rodríguez Loaiza Ingeniera sanitaria, doctora en Ingeniería. Docente de la Facultad de Ingeniería, Grupo GDCON. [email protected] Nancy J. Pino Microbióloga, doctora en Biotecnología. Docente de la Escuela de Microbiología, Grupo GDCON. Francisco Molina Ingeniero sanitario, doctor en Ingeniería Química y Ambiental. Docente de la Facultad de Ingeniería, Grupo GAIA. María Cristina Navas Bacterióloga, doctora en Virología. Docente de la Facultad de Medicina. Grupo Gastrohepatología. Jahir Orozco Holguín Químico, doctor en Química. Docente ad honorem de la Universidad de Antioquia, Grupo Tándem Max Planck en Nanobioingeniería.
Otros investigadores: Esteban Pérez Giraldo. Estudiante de Medicina. Facultad de Medicina. Grupo Gastrohepatología. Carolina Lisday Rivera. Estudiante de Ingeniería Sanitaria. Facultad de Ingeniería, Grupo GDCON. Juan José Velasco. Estudiante de Microbiología. Escuela de Microbiología, Grupo GDCON.
Edición 15
Enfrentar una pandemia como la del covid-19 requiere detectar la presencia del virus en una comu- nidad de la manera más eficiente posible. La detección del covid en aguas residuales permite esa amplitud en el muestreo mientras mantiene altos niveles de confia- bilidad.
Muestreo en aguas resi- duales. Foto | cortesía de proyecto.
7
Edición 15
A
finales de 2019, un brote de una nueva enfermedad respiratoria, que lue- go sería denominado síndrome de dificultad respiratoria aguda por co- ronavirus (SARS-CoV-2) apareció en la ciudad china de Wuhan. La enfer- medad, hoy conocida mundialmente como covid-19, se esparció a otras ciudades en China y posteriormente a todo el mundo, hasta llegar a ser declarada pandemia por la Organización Mundial de la Salud (OMS). El SARS-CoV-2 es un virus ARN, es decir, su material genético es más sencillo que el ADN, lo cual hace que tenga mayor probabilidad de presentar mutaciones a medida que se va replicando. Por otro lado, es un virus envuelto, significa que tiene una membrana compuesta por lípidos, que lo hace más lábil o débil a condiciones del medio externo tales como la temperatura o la humedad. Esa membrana es atravesada por tres proteínas, que son denominadas con letras: S, M y E. En un proceso fascinante de estas minúsculas estructuras, una parte de la proteína E de la membrana del virus, conocida como glico- proteína Spike (S), se une a un receptor específico en nuestras células. Para poderse unir requiere la acción de una enzima (ECA II) que le per- mite al virus en contacto ingresar a las células e iniciar el proceso de replicación para producir más partículas infecciosas, que van a infectar otras células adyacentes o a ser expulsadas al ambiente para, eventual- mente, infectar a otras personas. Sabemos que una vez el virus ingresa a nuestro cuerpo por medio de las vías respiratorias y llega a los pulmones, puede comenzar a dise- minarse por la sangre hacia otros órganos y sistemas, como los intes- tinos delgado y grueso. Allí puede continuar su proceso de replicación, para luego ser expulsado en las heces de los individuos infectados. Esto permite entender por qué algunos individuos presentan, además de los síntomas respiratorios, síntomas gastrointestinales. También por esto, la enzima que mencionamos antes, la ECA II, se encuentra expresada en múltiples tejidos y órganos de nuestro cuerpo;
8
Edición 15
especialmente en el intestino delgado, el intestino grueso, los pulmones, riñones, conductos biliares y el sistema nervioso central. En 2020, un estudio realizado en China encontró que, de 95 pa-
cientes infectados por SARS-CoV-2 que fueron incluidos, 58, es decir, el 61 %, presentaron síntomas gastrointestinales como diarrea, náuseas y pérdida del apetito. Además, se en- contraron partículas virales en las heces del 48 % de los pa- cientes analizados. Otras investigaciones sugieren que un individuo infectado puede excretar partículas virales hasta 47 días luego del inicio de los síntomas y permanecer infec- cioso hasta 14 días después. La vigilancia de las aguas residuales como estrategia epidemiológica
Sabemos que el covid-19 ingresa al cuerpo a través de las vías respiratorias, pero desde allí, y a través de la sangre, llega a otros órganos y sistemas, incluyendo los intestinos delgado y grueso.
Una de las estrategias para el control de la pandemia de SARS-CoV-2 es la identificación de personas infectadas y sus posibles contactos, mediante la detección del genoma del vi- rus o de anticuerpos dirigidos contra el virus. Sin embargo, sabemos que hay un porcentaje importante de personas que desarrollan infección asintomática, y dado que no es posible hacer pruebas a toda la población, se puede concluir que la proporción real de personas infectadas en los diferentes países, incluido Colombia, es mayor de lo que indican los reportes oficiales.
Planta de tratamiento de aguas residuales. Foto | cortesía de proyecto.
9
Edición 15
Por esta razón, se hizo necesario buscar estrategias que permitan rea- lizar el seguimiento a la población de forma masiva, no invasiva y de bajo costo, para de esta manera tomar las medidas de control que sean acordes con la situación. Además, la detección temprana de casos de covid-19 en las poblaciones como herramienta de seguimiento epidemiológico es funda- mental para la gestión de la salud pública en los «municipios no-covid» o con baja incidencia de la enfermedad. Es aquí donde se entiende la importancia del
Cuatro grupos de investigación analizaron las aguas residuales en los municipios de Granada, Marinilla y San Vicente Ferrer, para detectar, cuantificar y hacerle seguimiento al covid-19.
monitoreo del SARS-CoV-2 en aguas residuales, que per- mite, a partir de muestras recolectadas en plantas de tratamiento de ciertos municipios, hacer la detección, cuantificación y seguimiento del virus. La presencia del virus en las aguas residuales indica la circulación del vi- rus en la población y permite alertar de forma tempra- na a las autoridades frente a la presentación en el corto plazo —y hablamos de días— de casos positivos. De otro lado, la herramienta propuesta permite identificar las zonas donde se presenta circulación del virus y brindar información oportuna a las autoridades de salud. Este tipo de alternativas también son conocidas
como estudios epidemiológicos basados en aguas resi- duales (WBE, por sus siglas en inglés), que en décadas anteriores fueron de gran utilidad para conocer y estu- diar el comportamiento de otras infecciones como las causadas por el virus del polio, rotavirus y norovirus. Estos estudios basados en aguas residuales tienen grandes venta- jas, como la posibilidad de ser realizados en población general, su acce- sibilidad y su bajo costo. Además, desde el punto de vista de salud públi-
10
Muestreo en aguas residuales. Foto | cortesía de proyecto.
Edición 15
Muestreo en aguas residuales. Foto | cortesía de proyecto.
ca, permiten cuantificar el grado de infección en la población, tanto en casos asintomáticos como sintomáticos, y generar una alerta temprana para la toma de decisiones de manera oportuna para que tengan reper- cusiones positivas en dicha población. Aplicación en municipios de Antioquia Este proyecto fue planteado principalmente a los municipios de Antio- quia, como un método imparcial para evaluar la propagación de la in- fección en diferentes áreas, incluso en lugares los recursos para el diag- nóstico clínico son limitados y cuando los sistemas de información no están disponibles o no son factibles. Este sistema de vigilancia ambien- tal podría utilizarse como un instrumento para la toma de decisiones que permitan reducir el impacto de modificaciones en las estrategias de cuarentena. De hecho, una pregunta muy importante es ¿ qué estrategia
11
Edición 15
se debe implementar si se quiere tener datos confiables para reducir el riesgo de una « siguiente ola »? Las pruebas masivas en la población son la primera elección, pero en su ausencia, la monitorización del genoma viral en las aguas residuales puede dar información confiable de la situación. En el campo investigativo, el monitoreo de las aguas residuales puede ayudar a de- tectar variaciones en las cepas circulantes a través del análisis filogené- tico, permitiendo comparar los virus detectados en diferentes regiones y evaluar la evolución del genoma del virus. En la Universidad de Antioquia, bajo la iniciativa UdeA le res- ponde al COVID , el grupo de trabajo de Ambientes Saludables y los gru- pos de investigación GDCON, GAIA, Gastrohepatología y Tándem Max Planck en Nanobioingeniería se encuentran así evaluando la presencia del SARS-CoV-2 en aguas residuales como herramienta de alerta tem- prana del inicio de la circulación del virus en municipios no-covid o con a cabo mediante un muestreo compuesto semanal durante cinco horas, con toma de muestras representativas del cuerpo de agua completo —lo que denominamos alícuo- tas— cada hora entre las 7:00 y las 11:00 de la mañana, pues estas son las horas de ma- yor uso del agua y de los sistemas sanitarios por las personas. Las muestras son tomadas en recipientes adecuados y preservadas de acuerdo con los parámetros de estudio y pos- teriormente transportadas para su análisis al laboratorio del Grupo de Investigación GDCON de la Universidad de Antioquia. La detección del SARS-CoV-2 en las aguas residuales se realiza me- diante una técnica de extracción y análisis de material genético conocida como qPCR, para luego realizar una detección y cuantificación de partículas virales. También se realizan muestreos dentro del sistema de alcantarillado de los municipios, con el fin de definir las zonas de mayor riesgo, ofreciendo a las autoridades de salud información temprana de la localización de cir- culación de virus en contraste con la información de casos de pacientes po- sitivos. De esta manera, es posible plantear un sistema de alerta temprana zonificada para la autoridad de salud y realizar una estimación aproximada del número de personas infectadas en una zona con respecto al número de copias del virus encontradas en las aguas residuales. baja incidencia y seguimiento de su circula- ción en municipios covid en Antioquia. Para esta investigación se seleccionaron los mu- nicipios de Granada, Marinilla y San Vicente Ferrer, en el Oriente antioqueño. La obtención de las muestras se llevó
La detección de covid-19 en aguas residuales permite identificar la presencia del virus en una zona, para que las autoridades de salud definan las medidas preventivas más pertinentes.
12
Edición 15
Los resultados mostraron altas correlaciones entre la presencia del virus y los casos activos reportados, para los casos de los municipios de Marinilla y San Vicente Ferrer. Es decir, los reportes oficiales corres- pondían a lo detectado a partir de las aguas residuales. Sin embargo, en Granada, considerado como un municipio de baja incidencia, se ha en- contrado que la cantidad de partículas virales en el agua residual habla de una incidencia del virus mayor a los casos reportados. Esto represen- ta un reto para las autoridades sanitarias, pues puede significar muchos casos asintomáticos no reportados. El proyecto prosigue, no solo porque no se puede bajar la guardia ante una pandemia aún en marcha, sino porque sus resultados podrán ser adaptados para nuevas epidemias que probablemente llegarán. Por tanto, es importante estar preparados para enfrentarlas cada vez con más eficiencia epidemiológica, y para ellos se requiere el concurso de todas las áreas del conocimiento.
Proyecto: Seguimiento del SARS-CoV-2 en aguas residuales de municipios Covid y No-Covid 19 del departamento de Antioquia, como herramienta de monitoreo epidemiológico, alerta temprana y apoyo a la toma de de- cisiones en salud pública . Proyecto financiado por la Vicerrectoría de Investigación de la Univer- sidad de Antioquia mediante la iniciativa «UdeA responde al COVID». Con el apoyo de las empresas de servicios públicos de los municipios de Marinilla, Granada y San Vicente Ferrer, y de EPM.
13
Edición 15 ¿Un río camino a la UCI? Comprendiendo la salud ambiental del Suroeste antioqueño
Fabio de Jesús Vélez Macías Coordinador del Grupo GeoLimna. Néstor Jaime Aguirre Ramírez, Esnedy Hernández Atilano, Heazel Grajales, Orlando Caicedo Profesores de la Escuela Ambiental, Facultad de Ingeniería. David Fernández McCann Profesor del Departamento de Ingeniería Electrónica, Facultad de Ingeniería. Coordinador del Grupo GEPAR. Adrián Escobar Experto en avifauna y herpetofauna.
Usando la observación de la cuenca del río y realizando análi- sis de muestras en el laboratorio, este grupo de investigación pudo identificar descargas de aguar residuales, alta turbidez y pH moderadamente bajo, lo que significa un impacto en la calidad y una afectación a la vida silvestre y humana que tiene el San Juan como su fuente de agua.
Río San Juan, aguas abajo. Foto | cortesía del proyecto.
14
Edición 15
15
Edición 15 H
a corrido mucha agua debajo del puente, como dice el viejo adagio, desde que hicimos las últimas investigaciones en la
cuenca del río San Juan, que riega el municipio antioqueño de Andes, y adonde llegamos intere- sados en el hermoso paisaje y la riqueza natural del Suroeste antioqueño. Esa experiencia permitió al grupo GeoLim- na hacer investigación, formar ingenieros, magís- teres y doctores, y estar en contacto con la comu- nidad para escuchar sus relatos cotidianos de lo que es la vida en torno al río y contarles nosotros, unos completos extraños equipados con aparatos costosos y que llegan a la región de vez en cuan- do, cuál es nuestra impresión de ese recurso. Una impresión adquirida a partir de «fotos instantá- neas» que capturamos a lo largo de este siglo XXI . Esas fotos de cada momento están inmer- sas en documentos o artículos que todos pueden leer en internet, para comparar y cerciorarse, como se hacía antaño con las fotos familiares, de los cambios que cada día le vamos haciendo al río, para bien o para mal. Esos estudios tienen nombres que pue- den parecer extraños, y sus objetivos pueden no quedar muy claros para muchos: «Calidad fisico- química e hidrobiológica del río San Juan, Andes Antioquia» reza uno; «Diagnóstico fisicobiótico del parque natural la Nitrera: sistema de abas- tecimiento de agua del municipio de Concordia» se llama otro; o «Caracterización de la biodiversi- dad en el área de influencia de la reserva natural La Nitrera, Concordia», establece otro más. Entre las preguntas que formulamos esta- ba una especial: ¿cómo es la calidad del agua del río San Juan? Esta pregunta se puede responder desde varios puntos de vista, pero como en el grupo nos interesa la vida que hay en los ríos y cómo esta representa la situación por la que está pasando el agua, nos enfocamos en observar los pequeños organismos que viven asociados al río San Juan. Por estudios anteriores hechos en el
río, y en otros similares, sabíamos de antemano con qué nos podríamos encontrar. Porque estos seres vivos casi microscópicos aparecen y desaparecen, viven en comu- nidades, asociaciones de muchos o de a pocos, según el tipo de agua que va por el río. El agua es su casa; una casa que cambia en cada momento, cada segundo; unas veces limpia, otras veces sucia; al segundo insoportable, por cortos o largos períodos tóxica, o cada vez más invivible. Esa observación la acompañamos de mediciones hechas con instrumentos que sumergimos en el agua y con la toma de muestras que luego se analizan en labo- ratorio con equipos más potentes. Haciendo una identifi- cación de estos organismos y contando cuántos organis- mos de cada especie hay en la muestra se puede saber, para un fluido con semejante variabilidad como lo es el agua de un río, cómo han estado las condiciones ambien- tales en los últimos días. Esto es lo que se conoce como sus características fisicoquímicas y bióticas del río. ¿Dónde quedó entonces la «foto instantánea» que le hicimos al río San Juan? Quedó expresada en mapas, gráficas, documentos, artículos, socializaciones
16
Edición 15
A través de mapas, gráficas y documentos, el grupo registra el estado del río en un momento determinado, convirtiéndose en una «foto» para hacer análisis de su variabilidad en el tiempo.
Intervenciones hechas al río San Juan. Foto | cortesía del proyecto.
están moderadamente contaminadas por mate- ria orgánica a partir de la desembocadura en el río de la quebrada La Chaparrala. Para tener un panorama completo, es necesario estudiar otros contaminantes como los metales pesados, los plaguicidas y las bacterias. Las investigaciones de nuestro Grupo GeoLim- na, en el Suroeste antioqueño, fueron más allá del río San Juan y se expandieron a los ecosistemas cercanos, como la reserva natural La Nitrera, en el municipio de Concordia. Allí, junto con el Grupo GEPAR, se desarrolló la caracterización de la fauna en el área de influencia de la reserva natural, que incluyó un inventario de la fauna vertebrada terrestre y un acercamiento a la re- lación con sus habitantes. Entre los resultados obtenidos se registra- ron dos vocalizaciones de ranas en las orillas del embalse durante los muestreos nocturnos y se registró un ejemplar de falsa coral en el sende- ro del parque. Para la avifauna, se determinaron 108 especies de aves, entre las que se encuentran
con la comunidad en donde se explicó qué implicaciones tienen los resultados. Tablas y gráficas que sirven para interpretar los resultados. Mapas con organismos identi- ficados y su significado para la calidad del agua. El estudio se llevó a cabo durante un ciclo hidroló- gico, con el fin de registrar las dinámicas del río en época seca y en época de lluvia. Los seis sitios de muestreo se distribuían por altitudes de los 571 a los 1851 metros sobre el nivel del mar. En estos puntos se tomaron muestras de agua y se analizaron las variables de interés, tanto in situ (en el terreno) como luego en el laboratorio. Tras los análisis encontramos que el agua presen- tó valores de pH moderadamente ácidos, alta turbidez, alta demanda química de oxígeno (DQO) y altas concen- traciones de fósforo en época de lluvias, indicadores de que al río le llegan descargas de aguas residuales y que por tanto se ve afectado su uso para consumo humano y para la vida que lo habita. Esto sugiere un impacto im- portante sobre la calidad del agua, producto de la acti- vidad cafetera en la zona y a la alteración de los suelos debido a la ganadería. Se encontró además que las aguas
17
Edición 15
La importancia de estas cinco especies para el ecosistema es que algunas ( C. brevacauda, C. perspicillata ) son dispersoras de semillas de especies pioneras. Otras especies son polinizadoras ( A. gr . caudifer ), lo cual ayuda a la reproducción de las especies vege- tales del bosque. Finalmente, las especies insectívoras ( Myotis spp) ayudan a la regulación de las po- blaciones de plagas, tanto para los humanos como para el bosque. Por medio de las cámaras trampa ubicadas en el sitio La Peña se registraron cuatro gua- characas, en tanto aguas arriba de la quebrada La Nitrera se registra- ron un colibrí y un guatín, que es un organismo interesante en tan- to es un mamífero pequeño propio de la fauna silvestre del parque. Se observaron en este sitio cinco perros de talla media y probable- mente en condición feral, que se mueven a través de los senderos y
Un gremio trófico es una agrupación conceptual de especies que interactúan en algún sentido; por ejemplo: se alimentan de las mismas fuentes o usan una misma estrategia para sobrevivir durante la sequía.
quince migratorias y una especie casi-endémica. Todas las especies de aves registradas tienen un grado de preocupación menor respecto a su amenaza de extinción. En cuanto a mamíferos, en la reserva se capturaron 17 murciélagos pertenecientes a dos familias ( phyllostomidae y vespertilionidae ), 3 géne- ros ( Carollia , Myotis y Anoura ) y 5 especies ( Carollia perspicillata, Carollia brevicauda, Myotis sp.1, Myotis sp.2 y Anoura gr . caudifer ). La especie más común fue C. Perspicillata . El registro de una especie nectarívora como A. gr caudifer es significativo, ya que a lo largo de los muestreos se encon- traron especies pertenecientes a diferentes gremios tróficos importantes para el ecosistema, como lo son los frugívoros e insectívoros.
Algunos de los investigadores en trabajo de campo. Foto | cortesía del proyecto.
18
Edición 15
es posible que estén cazando fau- na silvestre en el parque. Cabe anotar que existe una relación estrecha entre los huma- nos y el parque natural la Nitrera, ya que los pobladores expresan un buen conocimiento de la fauna sil- vestre en la zona. Las personas que viven en las cercanías al parque La Nitrera han tenido contacto con el parque desde su creación y han podido observar desde su co- tidianidad la presencia de la fauna vertebrada y la importancia del parque para la naturaleza, tanto que el 93 % de los pobladores ma- nifiestan haber observado fauna silvestre en la zona de estudio. Los nidos, huellas, heces, dormideros, comederos y plumas fueron los tipos de rastros mayor registrados por los pobladores. El hallazgo inesperado y el paseo fueron las dos actividades más frecuentes a través de las cuales se observaron los rastros de fauna. Es de resaltar que la mayo- ría de los pobladores consideran que la fauna no presta ningún servicio, aunque se mencionaron algunos servicios como mascota y alimentación, entre otros. La mayoría de las personas entrevistadas, que son poblado- res cercanos al parque, consideran que la fauna silvestre es importan- te para la conservación del parque, no solo porque en su zona bosco- sa habitan vertebrados terrestres, sino también porque algunas de estas especies desarrollan su ci- clo de vida allí, encuentran en el parque un lugar de paso, o en el mismo se pueden manejar orga- nismos que requieren ser alojados.
Estudiantes de pregrado, maestría y doctorado formados: Diana Janeth David, Diana Elizabeth Morales, Juan Pablo Serna, Noris Quintero, Julián Ruiz, César Olmos, Alejandro Espinal, Alejandra Uribe, Shirley Giraldo, Tatiana Álvarez, Luisa Fernanda Pérez, Byron Castañeda, Mateo Parra, Melissa Zea, Benjamín Atehor- túa, Jenny Mesa, Fernando Cortés. Todos los pobladores de la zona consideran que los animales de La Nitrera se deben proteger. Entre las entidades protectoras de fauna, los pobladores mencionaron principalmente a Corantioquia, que es la autoridad ambiental en la zona, a las Empresas Públicas de Concordia, que cumplen una labor destacada en tanto la protección del ambiente en compañía de la Secretaría de Agricultura del municipio, y a la UMA- TA. Es importante destacar el rol que tienen los pobladores en la protec- ción de la fauna. En conjunto con ellos, las autoridades ambientales y las gubernamentales, la academia tiene que seguir aportando conoci- mientos y herramientas para la reservación de estos ecosistemas, y así evitar su deterioro.
19
Edición 15
Enseñar hoy…
¿vocación o necesid
20
Edición 15
Julián Barrera Gómez Licenciado en Educación Física.
n dad?
Sebastián Gaviria Cajares Ricardo José Pérez Herrera José Luis Ramírez Martínez Mauricio Sepúlveda Arango Nathalie Ospina Bayona Estudiantes de Licenciatura en Educación Física. Mateo Rincón Zapata Estudiante de la Facultad de Ciencias Agrarias. Edwin Mauricio Santa Jiménez Claudia María Mesa Torres Josué Álvarez Docentes del Instituto Universitario de Educación Física y Deporte, Universidad de Antioquia. [email protected] Integrantes del Semillero de Virtualidad Ciudadela Robledo –SETIC– de la Universidad de Antioquia.
Docente, maestro, profesor, tutor, entre otras tantas denominaciones que se le otorgan al guía que acompaña, un guía que ya no es el poseedor del conocimiento, sino que se convierte en aquel sujeto que orienta y es orientado; un guía que, hoy, se debe situar en el mismo plano del estudiante, sediento de vocación.
Ilustración semillero SETIC.
21
Edición 15 B
asta con dar un vistazo a las series de televisión que durante la déca- da de los 90 y la primera década del 2000, se mostraban a través de
be, pero que claramente el estudiante comprende. La docencia, tanto en contexto de la escue- la como en contexto de la universidad, se interesa por la formación del estudiante no como un sujeto a quien se le debe llenar las neuronas con datos teóricos fácilmente compilados en internet, sino como a un ser humano al cual el docente tiene la responsabilidad social de orientar para que se si- túe como un ser íntegro que toma sus propias de- cisiones con reflexión previa. El confinamiento social a escala mundial, derivado por la covid-19, materializó esos temo- res respecto a las capacidades que tenían los docentes para atender las nuevas realidades que desde hace tiempo rondaban el entorno. Volvieron a los hogares los progra- mas radiales de escuela en casa, se retornó a la escuela por corres- pondencia, se regresó a la escuela en donde los padres de familia eran los profesores; sin embargo, fue el modelo de educación vir- tual el que prevaleció en este con- texto, en el cual el gremio docente desplegó en tiempo récord todas sus estrategias para salvaguardar el ejercicio educativo. La Universidad de Antioquia, por ejemplo, se consolidó como campus para atender y formar a los docentes en este tema, procurando que el interés de la educación mediada por la virtualidad no se situa- ra en el dictamen de los contenidos a través de pla-
las pantallas con unos formatos divertidos y co- loridos en donde la trama se desarrollaba en la escuela, en la preparatoria o en la universidad, y cuyas situaciones denotaban preocupaciones ju- veniles en torno a las tareas, salir de campamen- to, invitar a la chica al baile, hacerle bromas a los
profesores, perseguir el autobús escolar y otras tantas situacio- nes entretenidas. Imaginar una serie en la
Tanto docentes como estudiantes tienen mucho que aprender sobre el uso de las TIC aplicadas a los procesos educativos. Lo vivido en la pandemia es una muestra de ello.
actualidad con estas caracterís- ticas y sin la presencia de redes sociales o teléfonos celulares ya no sería viable para los produc- tores, ni llamativo para los es- pectadores. Hoy las series de te- levisión que se mueven en este contexto presentan, además de nuevas experiencias en torno a estas modas, un alto contenido de situaciones conflictivas, bu- llying , sexualización, drogadic- ción e incluso suicidio, es decir, realidades laten- tes en el contexto social concurrente. Pensar en la educación hoy implica intere- sarse por el ejercicio educativo o, mejor dicho, ser docente para las nuevas generaciones conlleva también el pensar en los retos que se originan en la sociedad y que pocas veces el docente los perci-
taformas como Zoom y Meet, sino en man- tener, reforzar y po- tenciar las relaciones entre los docentes y estudiantes. Esta misma universidad, desde antes del menciona- do fenómeno global, avizoraba vestigios de las intenciones
Ilustración semillero SETIC.
22
Edición 15
incorporado», son falsas. En la realidad, ni los docentes ni los estudiantes deben ni están obli- gados a conocer las respuestas para todo lo que acontece en este campo. De acuerdo con los resultados de esta sis- tematización, se concluye que el docente de hoy debe integrar tecnologías de la información y de la comunicación en sus clases, lo que significa un proceso de preparación previo sobre el manejo de las herramientas y sobre la correcta integración en sus clases como recurso didáctico y pedagógi- co. Esto denota entonces que la tecnología es hoy por hoy un asunto intrínseco a las áreas del cono- cimiento, es decir, que no se debe pensar la forma- ción holística de los futuros profesionales solo con saberes específicos de las áreas de base, sino que resulta imprescindible formarlos también respec- to a las estrategias de vinculación de dichos sabe- res en el escenario de un mundo globalizado. De allí la necesidad de que los jóvenes de hoy, que se interesen por el abordaje de las cien- cias de la educación, consideren como requeri- mientos formativos el estudio de la digitalidad y su incorporación en el entorno académico. Si bien el uso de recursos análogos, como el tablero, la tiza, el cuaderno, el libro impreso, entre otros, son culturalmente relevantes en el aula de clase, también será necesario el tratamiento de ayudas digitales para provocar en los jóvenes el interés por aprender a través de recursos con los que están más familiarizados, pero más importante aún es comprender que las herramientas con que se dicten las sesiones de clase no representarán el todo de la educación, sino el medio . Y no se preocupen, los docentes no serán reemplazados por los robots o por las pantallas. Estas máquinas dependen de los docentes para poder servir. Proyecto Sistematización de experiencias de proce- sos educativos mediados por TIC en el Ins- tituto de Educación Física y Deporte, la Fa- cultad de Ciencias Agrarias y la Escuela de Nutrición y Dietética de la Sede Robledo de la Universidad de Antioquia .
Ilustración semillero SETIC.
que tenían algunos docentes en incorporar acciones con inclusión digital, con la intención de generar formas de comunicación con sus estudiantes de for- ma diferente a la tradicional. Es por ello por lo que, en Ciudadela Robledo, una sede de la Universidad de Antioquia, se consolidó un semillero de investiga- ción a través del cual se podrían explorar los asuntos concernientes a la formación docente y estudiantil en torno a la apropiación de las herramientas de Tecnologías de la Información y la Comunicación –TIC–; iniciando con esta unión, un primer estudio buscaría resolver la pregunta: ¿ cuáles han sido los procesos educativos mediados por TIC en el Instituto de Educación Física y Deporte, la Facultad de Cien- cias Agrarias y la Escuela de Nutrición y Dietética? La metodología de estudio se centró en el modelo de sistematización, a través del cual se re- copilaron las experiencias de los docentes que inte- graron TIC en sus prácticas académicas hasta antes del año 2020. A través de la aplicación de encues- tas, entrevistas y un posterior análisis, se desveló, por ejemplo, que los docentes universitarios, aun cuando conocen las necesidades instrumentales y se capacitan para atenderlas, también poseen di- ficultades como cualquier otro habitante digital y, aun cuando su formación universitaria ha sido am- plia, requieren ayuda de sus estudiantes o compa- ñeros de trabajo para manejar estas herramientas tecnológicas. Las ideas de que «los docentes deben conocer todo porque pasaron por la universidad», así como la de «los jóvenes de hoy nacen con el chip
23
Edición 15 Hongos: más allá de lo visible Manuela Montoya Castrillón Ingeniera Bioquímica. [email protected] Kelly Johana Serna Vasco Ingeniera Bioquímica. [email protected]
Integrantes del Semillero de Investigación Desarrollo Tecnológico en Procesos Bioquímicos —DETECBIO—, Seccional Oriente, Universidad de Antioquia. Laura Inés Pinilla Mendoza Bióloga, doctora en Biotecnología. [email protected] Integrante del Grupo de Investigación e Innovación en Formulaciones Químicas, Escuela de Ciencias de la Vida, Universidad EIA. Juliana Osorio Echavarría Ingeniera Química, magíster en Ingeniería. [email protected] Integrantes del Grupo de Bioprocesos, Departamento de Ingeniería Química, Universidad de Antioquia. Juan Manuel Quiceno Biólogo, magíster en Ciencias con énfasis en biotecnología de plantas. Gestor tecnológico en la Red Tecnoparque nodo Rionegro, Centro de la Innovación, la Agroindustria y la Aviación - Regional Antioquia. Liliana María Cardona Bermúdez Zootecnista, magíster en Biotecnología. Gestora tecnológica en la Red Tecnoparque nodo Rionegro Centro de la Innovación, la Agroindustria y la Aviación - Regional Antioquia.
24
Edición 15
El conocimiento sobre la diversidad de hon- gos presentes en el Oriente antioqueño abre la puerta a nuevas oportunidades para la industria alimentaria, cosmética, agrícola, textil, entre otras. Los investigadores advierten la necesi- dad de seguir explorando la biodiversidad para encontrar alternativas innovadoras para el de- sarrollo de la subregión.
25 caído en la reserva La Lorena. Foto | cortesía del proyecto. Micelio blanco de un hongo recolectado de un tronco
Edición 15
P ensar en hongos resulta para to- dos, casi siempre, en las mismas imágenes: por un lado, ese moho verde o negro que les da a las fru- tas y las verduras cuando se están dañando, los hongos rosados comunes en las arepas o el famoso hongo asociado con la onicomico- sis, una infección que afecta principalmente a las uñas de los pies —el llamado «pie de at- leta»—. En el mejor de los casos pensamos en los champiñones, las orellanas o los portobe- llos que se utilizan para preparar muchos pla- tos altamente nutritivos y sabrosos. Y quizás muchos identifiquen otro grupo altamente beneficioso para el ser humano, que incluye el hongo Ganoderma lucidum y que se ha vuelto famoso por sus múltiples propiedades medicinales. ¿No es sorprendente saber que hacen una pasta de dientes con sustancias producidas precisamente por Ganoderma ? Estos ejemplos muestran la gran varie- dad de hongos que existen: los hay desde or- ganismos microscópicos hasta cuerpos ma- cro, y desde hongos comestibles y nutritivos hasta hongos letalmente tóxicos. Ahora bien, ¿qué es exactamente un hongo? Los hongos son un conjunto de or- ganismos que están clasificados en un reino totalmente distinto al de las plantas, los ani- males y los protistas. Hace muchos años, los hongos se clasifi- caban en el mismo grupo que las plantas, pues algunos de los que son visibles al ojo humano se parecen estructuralmente a ellas. Luego se descubrió que estos organismos no hacen foto- síntesis y que no son solo aquellos que crecen sobre la tierra con forma de sombrilla, sino que también los hay unicelulares, como las levadu- ras, o filamentosos, como los mohos. Es más, son tan variados que son el segundo grupo de organismos más abundante del planeta, luego de los insectos. Adicionalmente, estos organis- mos tienen una importancia ecológica vital
Micelio azul de un hongo recolectado en la reserva La Lorena. Foto | cortesía del proyecto.
26
Edición 15
por el hecho de ser los principales descompo- nedores de materia orgánica debido a que la reciclan al igual que a otros nutrientes, liberan- do sustancias necesarias para los ciclos vitales de otros organismos como plantas y animales, y ayudando a mantener el correcto funciona- miento de los ecosistemas. Así pues, muchos hemos entrado en conflicto al pensar en hongos. Son tantos y tan variados que encasillarlos como «buenos» o «malos» no es tan sencillo como vocalizar la palabra. Los hongos también resultan ser de re- levancia industrial, ya que pueden generar una amplia gama de sustancias que utilizamos en el día a día y que van desde un ablandador de carnes (enzima papaína) o un antibiótico (peni- cilina) para combatir enfermedades causadas por bacterias, hasta la cerveza y el pan que se hacen con ayuda de las levaduras. Por eso, es necesario conocer y recono- cer estos organismos, pues de esta manera se pueden identificar cuáles de ellos pue- den producir nuevos compuestos de interés, y cuáles producen compuestos existentes, pero con una eficiencia mayor que la de los métodos vigentes. ¿Por qué no pensar enton- ces que este tipo de organismos generadores de productos de alto valor se podrían apro- vechar en nuestro país y más sabiendo que Colombia es uno de los países con mayor di- versidad biológica en el mundo? Particularmente, el Oriente antioqueño, al ser una región con tanta variedad de ecosis- temas (páramos, embalses, bosques y otros), tiene gran diversidad de especies de hongos. Sin embargo, debido a distintos factores como lo son las problemáticas sociales, el difícil ac- ceso a ciertas zonas, el conflicto armado, el poco apoyo del Gobierno para impulsar la uti- lización de nuestra biodiversidad de manera sostenible y las pocas políticas públicas que impulsen un desarrollo basado en la misma naturaleza, ha disminuido la posibilidad de conocer los hongos con los que cuenta este te- rritorio. Por esta razón, que buscamos identifi-
27
Edición 15
car, caracterizar y evaluar la potencial apli- cación de los hongos nativos del Oriente antioqueño presentes propiamente en la reserva natural campesina La Lorena, ubi- cada en el corregimiento Alto de Sabanas del municipio de Sonsón, Antioquia. Para ello se realizó una colecta de distintas variedades de hongos, prece- dida por un permiso de «recolección y movilización» tramitado ante la Autori- dad Nacional de Licencias Ambientales —ANLA—, organización que controla que no se presente una intervención desmedi- da en los ecosistemas investigados. Poste- riormente, los hongos fueron llevados al laboratorio para ser analizados. Los hongos se cultivaron en condi- ciones que simulaban su entorno natural y luego, con ayuda de claves taxonómicas y secuenciamiento genético, fue posible identificarlos y aislarlos. También se rea- lizaron algunas pruebas cualitativas para precisar si los hongos identificados tenían potencial para impedir el crecimiento de otros hongos que afectan cultivos de importancia de la región del Oriente an- tioqueño como el café, las hortalizas y el Aunque estuvieron clasificados dentro del grupo de las plantas, ahora sabemos que los hongos son un grupo o reino diferente, conformado por organismos
cannabis. También se evaluó el potencial de las cepas para impedir el crecimiento de bacterias causantes de enfermedades y para producir enzimas de interés como las amilasas —que están presentes también en nuestra saliva y además son utilizadas en la industria alimentaria— u otras como proteasas, lipasas, catalasas, celulasas y enzimas ligninolíticas. Finalmente, se de- terminó la capacidad de estos organismos para degradar colorantes, habilidad que suele ser de utilidad en la industria textil para evitar una contaminación de los cuer- pos de agua con dichas sustancias. Las identificaciones morfológica y molecular indicaron que en la reserva es posible encontrar y aislar hongos filamen- tosos de los géneros Trichoderma sp . Penici- llium sp . Mucor sp. y Aspergillus sp. y levadu- ras pleomórficas del género Lecythophora sp. de los cuales 10/14 presentan potencial antagónico (contra hongos patógenos como Colletotrichum sp. que afecta prin- cipalmente al cultivo del café, y Fusarium sp . que afecta a los cultivos del banano, maíz, algunas hortalizas, etc.), 2/14 capa- cidad antimicrobiana (contra bacterias patógenas causantes de enfermedades en el ser humano como Salmonella sp. Esche- richia sp. y Pseudomonas sp ), y 5/14 gran potencial para decolorar tintes altamente contaminantes (como negro remazol, azul directo, negro sulfuroso, amarillo oro y rojo EFDACRON) con porcentajes de remoción por encima al 80 %. Adicionalmente, pre- sentaron potencial para producir enzimas ampliamente utilizadas en la industria, siendo las de mayor incidencia las ami- lasas, proteasas y peroxidasas, lo cual se relaciona con los sustratos y la necesidad de degradar las sustancias encontradas en el ambiente donde fueron recolectados con el fin de utilizarlas para su nutrición. Además, los géneros Trichoderma sp. y As- pergillus sp. fueron los géneros que mayor
unicelulares y pluricelulares.
28